Y sí, el protagonista de dicha acción fue el dueño del cortijo. O del juguete. El que pone la pasta, vamos. El que a base de petrodólares ha conseguido rendir a sus pies a la industria del boxeo para que pueda jugar a hacer y deshacer; Turki Alalshikh.
‘Su excelencia’, como así le llaman todos, es el máximo representante de Arabia Saudí en temas de entretenimiento. Y sí, su apuesta por el boxeo supone un soplo de aire fresco del que los aficionados, unos más que otros, siempre le estarán agradecidos. Eso sí, lo del pasado sábado fue una vergüenza y actitudes como esta deberían ser erradicadas.
¿Qué hizo? Muchos ya lo sabréis, otros no. Se estaba disputando el mundial WBC Medio entre el campeón, Carlos Adames, y el aspirante y ojito derecho de Turki: Hamza Sheeraz. En la previa Adames tuvo problemas para volar a Riad y afirmó que Sheeraz parecía ser un púgil espectacular, pero que lo iba a tener que demostrar frente a un campeón de verdad. Vamos, que la carrera a la carta iba a llegar a su fin.
Durante la pelea vimos mejor al campeón. Mereció ganar Adames, sin duda. Sheeraz, al parecer, se había lesionado una mano durante los primeros asaltos de la pelea y los nervios en el equipo británico eran claros. Frank Warren se dejó caer por la esquina de su pupilo, pero nada, no reaccionaba como querían.
¿Solución? Es mi cortijo. Y es grave. Terminado uno de los últimos asaltos (creo que el décimo) pudimos ver a Turki levantarse. ¿Fue a la mesa federativa? Hombre, no se vio, pero no tardó mucho en llegar a la esquina de Sheeraz con información calentita “vas dos puntos abajo”, repitió. E insistió. En esa instancia un juez ya tenía como ganador a Adamas y otro, el italiano, posiblemente a Sheeraz (increíble). ¿Estaba dando información sobre el juez que acabó dando el 114-114? No tengo pruebas, pero tampoco dudas.
Repito, lo mejor de Turki es su apuesta por el boxeo. Siempre agradecido, pero me deja con la duda de saber si a este hombre le resulta tan fácil sacarle la información que necesita a un supervisor e ir pregonándolo a grito limpio. Mira que a lo largo de mi vida he visto cómo se conseguía info de las puntuaciones, pero nunca con este descaro. No se le pueden reír todas las gracias, pero a ver quién se atreve a hablar del traje del emperador.
Es su cortijo… pero es el mejor de todos. Adames fue perjudicado, pero visto lo visto fue una gesta salir de allí como campeón; no era su fiesta.
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