Luego quise entrar a explicar qué futuro pueden tener, en el campo profesional, tanto José Quiles como el resto de componentes del equipo nacional y me di cuenta que iba a ser una tarea larga y compleja. No es sencillo ya que todo el mundo tiene su opinión pero yo, desde aquí, os explicaré la mía. Cruda realidad.
José Quiles quería probarse en el campo profesional y lo hizo. Recordad que debutó en diciembre de 2022 venciendo a los puntos, con susto incluido, a Eduardo Valverde. ¿Luego qué? Pues nada. Tocaba pensar en París 2024 y no le llegó ninguna propuesta parecida a un proyecto fiable donde él viese que se podía hacer carrera.
Podemos decir lo mismo del resto de boxeadores del equipo nacional. Gazi, Miguelón, Reyes Pla… . Debutaron, vieron lo difícil que es ser boxeador profesional en España, y se quedaron esperando a ver si salía algo bueno. Grande y estable. Pero ya han visto que el camino a tomar debe ser otro, sobre todo porque uno de los boxeadores mencionados tuvo que aguantar que le echasen a él la culpa de la calidad del rival que le pusieron delante.
¿Está mal la cosa? Hombre, sólo hay que ver las cosas con calma. París 2024, España consiguió 2 medallas Olímpicas (Ayoub y Reyes Pla) y 2 Diplomas (Lozano Jr. y Quiles). ¿Ha pasado algo? No. Bueno, sí, han podido ver que otros boxeadores como Omari Jones, Marco Verde, Teremoana, Pat Brown o Caitlin Parker están terminando de negociar sus contratos con Matchroom para que desde todo los rincones del mundo les veamos hacer carrera a través de DAZN. ¿Y los nuestros? Bien de salud, gracias.
¿Es justo? Coño, pues lo será. Los mencionados son buenos boxeadores y de países donde el boxeo vende. Si no te ofrecen algo igual a lo que le han ofrecido a boxeadores a los que has ganado, o a los que superas en resultados, ya sabes que no es por un tema estrictamente deportivo. Se asume y se buscan soluciones.
¿Qué se puede hacer aquí? Esperar un buen proyecto. ¿Y si no lo hay? Aprovechar que el boxeo profesional IBA no discrimina, busca el talento de todos los países y paga bastante bien. ¿Es la solución? No, pero es lo mejor que se tiene a mano en estos momentos. Ni brillando en Juegos, mundiales o europeos les ha llegado algo interesante a los boxeadores del equipo nacional. Cruda realidad, por desgracia. Bienvenido, boxeo profesional IBA.
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